UN “AMBICIOSO” PLAN RESTAURADOR

Así califica el Ayuntamiento de La Palma los trabajos de “restauración y limpieza” que se están acometiendo en el Iglesia de San Juan Bautista, el monumento más importante de La Palma, aunque -incomprensiblemente- aún no esté catalogado Bien de Interés Cultural por la Junta de Andalucía. Y eso que su expediente se incoó hace más de 25 años… En la foto se muestra el penoso estado de iluminación “artística” en la que se ha llevado la cúpula del Sagrario nuevo en estos últimos 9 años. Del mismo modo la iluminación exterior del templo debería ser renovada.

Este “necesario” plan pretende restaurar “las piezas claves del conjunto histórico–monumental palmerino”, según afirma nuestro Ayuntamiento. Se contemplan los siguientes hitos:

1.- La limpieza de la techumbre, la restauración de las linternas de las cúpulas central y la del Sagrario nuevo y de algunas “zonas puntuales” del interior del mismo, la eliminación de nidos de cigüeñas y palomas, y la renovación de la pintura exterior de la Iglesia de San Juan Bautista. El presupuesto es de sólo 34.000 euros (unos 5,7 millones de las antiguas pesetas), lo que supone un paupérrimo 0,3 % del presupuesto municipal palmerino.

2.- Restaurar la Iglesia del Valle, especialmente en el tratamiento de las estructuras de madera.

3.- Restaurar también el campanario del Convento de las Hermanas de la Cruz, que se encuentra en “evidente estado de deterioro”.

Ante este improvisado “plan restaurador” debemos tener en cuenta lo siguiente. La mayor reforma llevada a cabo en la Iglesia Parroquial de La Palma tuvo lugar tras los lamentables destrozos ocurridos en la Guerra Civil, en 1936. Después el templo tuvo un mínimo plan de limpieza y pintura durante los años setenta, hasta la última restauración en profundidad llevada a cabo en 1999, hace ahora 9 años. Sin embargo, desde entonces la humedad no se ha eliminado (como se pronosticó), avanzando el deterioro del templo de forma galopante. Es más: los frescos de la capilla del Santo Entierro se están perdiendo, los del Sagrario nuevo igual, pero éstos a pasos agigantados. Existen humedades por numerosos sitios, desprendimiento de enfoscados, etc. La restauración propuesta es bienvenida, pero debería ser mucho más ambiciosa -de verdad-, pues después de 9 años de una “restauración en profundidad” se ha conseguido bien poco.

Además y en vista a la reciente catalogación BIC, en la categoría de Monumento, del Valle, esa ansiada y urgente restauración propuesta por la Alcaldía (tarde, pero cierta) debería ser llevada a cabo por la Dirección General de Bienes Culturales de la Junta de Andalucía, administración competente que tiene -y debe- co-financiar este ambicioso proyecto, junto con el Obispado de Huelva.

Por otro lado, no debería olvidarse la necesaria restauración de las Plazas del Corazón de Jesús y de Ntro. Padre Jesús, en deplorable estado de conservación. Restauración quiere decir reponer los elementos constructivos que estén deteriorados, pero nunca expoliar las plazas y sustituir el antiguo ladrillo macizo por otro “moderno” de dudoso mal gusto, y restaurar, del mismo modo, la magnífica azulejería trianera de bancos y jardines.

Por último, no debemos de olvidarnos del Monumento que dio origen a esta Plataforma Ciudadana. Volvemos a exigir que se restaure la expoliada chimenea de Verdier, como prometió el Alcalde de La Palma el pasado 4 de septiembre en el diario El Mundo. Y, del mismo modo, hacer un plan de integración de la chimenea y torre-alambique de las Bodegas Salas, y de la torre-alambique de las Bodegas Pichardo, en los respectivos conjuntos residenciales que se pretenden construir. Fue un compromiso del señor Alcalde del que, por ahora, sigue guardando silencio.

Éste debería ser el “ambicioso” plan restaurador que necesitan “las piezas claves del conjunto histórico–monumental de La Palma”, al que habría de acompañarle un verdadero plan de rehabilitación-restauración de viviendas ubicadas en el centro histórico de La Palma y la restauración, del mismo modo, del adoquinado de las calles Hermanos Cuevas, Rábida y San Sebastián…

Como venimos insistiendo desde esta Plataforma Ciudadana el exquisito Patrimonio de La Palma del Condado contiene edificios religiosos, civiles y también industriales. El mantenimiento, respeto, restauración y difusión de los mismos es tarea de todos: de los ciudadanos, como nos recuerda el Consistorio palmerino en un spot televisivo, pero también de las Administraciones públicas, de cuyas manos depende -directamente-, pues están obligadas por Ley (Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español).